Un lujazo para disfrute de todos los sentidos - Tinto Pesquera Millenium Reserva 2002.

Pocas veces se puede disfrutar de un VINO (con mayúsculas) de esta categoría. Básicamente porque su precio, de unos 75-80 euros por botella, lo alejan de los bolsillos menos afortunados, como es mi caso y además porque este tipo de reservas solo se encuentran en Tinto Pesquera en los años 2002 y 1996, coincidiendo con las mejores cosechas. Ayer, en casa de un buen amigo, tuve la ocasión de degustarlo, de disfrutarlo en la mejor compañía, departiendo en  animada conversación. Como se han de beber los buenos vinos.

Con un vino de más de 10 años nunca se sabe, lo mismo resulta un néctar de dioses que un fiasco absoluto. Ayer la fortuna nos sonrió y ni siquiera necesitó decantación. Y no saben cómo nos alegramos!!. 

Es un vino elaborado con uva tempranillo, 100% tinto fino, por las bodegas Pesquera de Alejandro Fernández. Su graduación alcohólica es de 13,5º.

De un color acerezado y brillante, resulta bastante seductor. Al olerlo, en seguida nos damos cuenta de que tenemos entre manos "otra cosa", pues su aroma es complejo, con matices frutales y especias, poderoso e intenso.

Con el primer trago adivinamos que es un vino de estructura compleja y muy persistente, más de 5 segundos. Tiene cuerpo y mantiene matices frutales en la boca, con un toque sutil de alcohol, equilibrado en todo caso, y que con el transcurrir de los minutos no hace sino mejorar en todas sus sensaciones. Un vino que, si tenemos la suerte de que el tiempo no le haya causado estragos, vale cada uno de los euros que cuesta. Alto standing en un caldo de precio alto pero con una incuestionable calidad. Uno de esos que hay que tomar , al menos, de vez en cuando. Nosotros lo acompañamos ayer de unos embutidos y quesos. Resultado redondo. Hoy es uno de esos días en los que me gustaría poder volver a un momento del pasado.... del más reciente para volver a probarlo.

   Puntuación de Baco

5 puntazos y medio.

   Puntuación de Dionisos:

Escala de puntuaciones:

1	Para largarlo por el desagüe del fregadero
2	Mejor en el guiso.
3	Se bebe, pero no vale lo que cuesta.
4	Un vino agradable y correcto.
5	Me gusta, me gusta, me gusta.
6	Orgásmico.

Ultra low cost bien hecho - Catania cosecha 2012

He de reconocer que no soy muy amigo de los vinos jóvenes, con la excepción de algunos de Toro que me encantan. Hace un par de semanas, examinando las estanterías de vino de un supermercado, a mi pareja le llamó la atención una discreta botella bordelesa de sobria etiqueta gris. Se trataba de un absoluto desconocido para nosotros, un tal Catania, D.O. Ribera del Duero, cosecha de 2012. En esa ocasión no me atrajo lo suficiente como para pensar en comprarlo y eso que el precio invitaba a ello, poco se podía perder ya que solo costaba 2,99 eur, pero ahí quedó la cosa. Esta semana volvimos al mismo establecimiento y ella se volvió a fijar; resultado: lo compramos y menuda sorpresa!

Se trata de un Ribera del Duero joven y ultra low cost con aspiraciones de convertirse en un vino más grande (a ver si encuentro el crianza al que la guía Peñín otorga nada menos que 91 puntos sobre 100 y Robert Parker 90, casi nada). No lo llega a conseguir del todo, por poco, pero por menos de 3 euros la botella, es una magnifica opción para convertirse en un vino de diario.

Se trata de un vino tinto de las Bodegas Gormaz, tempranillo 100% y con 14º de volumen de alcohol. Su color es bastante atractivo, rubí brillante, con un olfato algo limitado, de poca intensidad y alcohol inapreciable, pero agradable con algo de fruta que a mí me recordó a picotas.  

El primer trago te descubre poca persistencia, de unos 2-3 segundos pero es suficiente para percibir un sutilísimo toque de madera en su sabor más que a fruta, que pasa desapercibida. Supongo que por su juventud, adolece de algo más de cuerpo y estructura, que lo convertirían en un vino muy interesante, pero es indudable que se bebe y el resultado es algo más que agradable. La relación calidad -precio es, por lo tanto, óptima. Yo lo recomiendo.

Le voy a dar 3 puntos, porque efectivamente se bebe, pero obviemos la coletilla de "no vale lo que cuesta". El Catania, no sólo se bebe sino que le da mil vueltas a una gran parte de los vinos de 3-5 euros que conozco (y son unos cuantos, la verdad).....




  Puntuación de Baco

3 puntazos bien merecidos.

   Puntuación de Dionisos:

no sabe no contesta

Escala de puntuaciones:

1	Para largarlo por el desagüe del fregadero
2	Mejor en el guiso.
3	Se bebe, pero no vale lo que cuesta.
4	Un vino agradable y correcto.
5	Me gusta, me gusta, me gusta.
6	Orgásmico.

Es vino!! - Finca Resalso cosecha 2012

Hoy os presentamos un vino tinto de la Ribera del Duero D.O. Calificada. Un Finca Resalso cosecha de 2012 de bodegas Emilio Moro. Se compone de tinto fino 100%, es decir de uva tinta del país, tempranillo, y con una graduación alcohólica de 13,5º.A pesar de su juventud, nada mas descorchar la botella, nos seduce con un aroma de gran intensidad y muy agradable que nos recuerda a frutos rojos y que mi colega Baco percibe entremezclados con matices de canela. En todo caso un gran aroma.

Su color es acerezado, no demasiado brillante, neutro y que no aventura el tremendo gustazo que supone darle el primer trago que, aunque breve, nos acaricia con una delicadeza impropia de un vino tan joven. Es intensísimo al paladar y con una persistencia propia de los "buenos vinos", superior a cinco segundos acompañado de un sutil toque alcohólico que, en absoluto, empaña el resultado final. Es un vino con cuerpo, equilibrado y perfecto para tomar solo. Un señor vino que en nada tiene que envidiar las crianzas más largas de otros caldos. Un vino, en definitiva, para cualquier ocasión y que por menos de 8 euros le da muchas lecciones a vinos de precios muy superiores. Un joven con mucha madurez, vamos. El nombre de Emilio Moro, de nuevo, como garantía de calidad.

   Puntuación de Baco

5 puntazos bien merecidos.

   Puntuación de Dionisos:

5 puntos bastante holgados

Escala de puntuaciones:

1	Para largarlo por el desagüe del fregadero
2	Mejor en el guiso.
3	Se bebe, pero no vale lo que cuesta.
4	Un vino agradable y correcto.
5	Me gusta, me gusta, me gusta.
6	Orgásmico.

El valor de un clásico - Luis Cañas crianza 2010.

En esta ocasión os presentamos un clásico de Rioja. Casi no necesita presentación. Un Luis Cañas crianza de 2010, 95% uva tempranillo y un 5% de garnacha. 14% de volumen alcohólico de las bodegas del mismo nombre...

En cuanto lo abrimos, nos damos cuenta de su nobleza, de su carácter equilibrado. Tanto a Dionisos como a mí nos transmitió inmediatamente un aroma agradable, sin intensidad excesiva ni exceso de alcohol. Su color es rubí brillante, muy atractivo y, al primer trago, todas las buenas sensaciones que intuíamos se ven confirmadas. Estamos ante un buen vino y de mejor precio (entre 8-10 eur.). De una cuidada elaboración. Persistencia adecuada de unos 4 o 5 segundos, buena estructura y un sutil afrutado silvestre que a ambos nos recordó a mora. En algunas de las principales guías le conceden hasta 91 puntos sobre 100. No lo veo excesivo, sin embargo Dionisos discrepa en este punto y, a pesar de que reconoce sus virtudes, cree que son puntuaciones excesivas. A mí me ha convencido.

En cuanto a la presentación, poco que decir, austera y elegante en clásica botella bordelesa con un etiquetado correcto y fino. Como en lo anterior, siempre huyendo de los excesos... un vino para cualquier ocasión.

   Puntuación de Baco

5 puntazos bien merecidos.

   Puntuación de Dionisos:

4 puntos bastante holgados

Escala de puntuaciones:

1	Para largarlo por el desagüe del fregadero
2	Mejor en el guiso.
3	Se bebe, pero no vale lo que cuesta.
4	Un vino agradable y correcto.
5	Me gusta, me gusta, me gusta.
6	Orgásmico.

Un nombre inmerecido - Altos Ibéricos crianza 2011

Altos Ibéricos crianza 2011 - D.O. Rioja - Bodegas Torres

En el día de hoy, Dionisos y yo hemos podido catar un nuevo vino. No se trataba, como en el caso del Ederra ya comentado, de un viejo conocido, sino de una novedad para nuestros gaznates. Hablamos de un Altos Ibéricos D.O. Rioja 2011 de bodegas Torres, 100% tempranillo y 14% de volumen de alcohol. Y no ha podido ser un estreno mas decepcionante.

Una vez descorchado no destaca en nada. Su color es apagado y sin brillo. Olfativamente es absolutamente plano, aburrido, en él solo se aprecia un leve toque alcohólico que no anticipa nada positivo.

En boca es insulso, excesivamente amable, sin fuerza. No está mal estructurado pero, de nuevo, lo único destacable es su punto alcohólico que acertadamente me apuntó Dionisos desde el primer trago. Su persistencia es muy limitada y no deja huella alguna. Sin matices frutales apreciables tan solo ofrece un ligero toque amaderado que pasa con más pena que gloria. Una lástima, sobre todo, en una botella cuyo coste en supermercado está por encima de los 6 euros. El adjetivo que mejor lo define es ABURRIDO. No se puede calificar como un mal vino, pero tampoco ofrece una experiencia destacable en ningún aspecto. Es uno más y eso es lo que lo mata. Nadie lo recordará después de haberlo bebido. Su nombre es, por lo tanto, absolutamente inapropiado. Ni es alto, ni es ibérico...de bellota claro está… (Firmado: Baco y Dionisos).

 

 

    Puntuación:

3 Puntos acordados entre Baco y Dionisos.

 

Escala de puntuaciones:

1	Para largarlo por el desagüe del fregadero
2	Mejor en el guiso.
3	Se bebe, pero no vale lo que cuesta.
4	Un vino agradable y correcto.
5	Me gusta, me gusta, me gusta.
6	Orgásmico.

No te pierdas el Blog de mis amigos Víctor y Sandra sobre moda. Pincha el siguiente enlace para acceder:
http://rockabillyrg.blogspot.com.es/

 

Para no equivocarse nunca - Ederra crianza 2010.

Ederra Crianza 2010 – D.O. Rioja – Bodegas Bilbaínas.

1. Vamos a abrir propiamente este blog con uno de mis riojas tintos de bajo coste favoritos, el Ederra de Bodegas Bilbaínas, en este caso en crianza de 2010, elaborado 100% con la variedad de uva tempranillo y un volumen de alcohol de 13.5⁰. Un vino low cost de sorprendente relación calidad-precio. Apto para disfrutarlo con cierta habitualidad, sin arruinarnos, ya que lo podemos encontrar en las estanterías de los hipermercados por un precio que oscila entre los 3.99 y los 5.65 eur. aproximadamente. Una vez descorchado nos embriaga levemente con un ligero toque alcohólico que nos puede llevar a engaño, ya que en boca se muestra bastante equilibrado y fresco, con una persistencia no demasiado intensa pero suficientemente agradable. Su color es granate, un tanto apagado, sin demasiado brillo pero noble. No se puede pedir mucho más en esta gama de precios. En mi cava lo conservo a 17⁰ y nunca me ha defraudado. Yo lo suelo tomar tanto solo como con quesos curados o semis y entra genial. Un vino, en definitiva, absolutamente recomendado con el que no te equivocarás. Para mí se ha convertido en un básico. Un buen vino.

          Puntuación:

4 puntos holgaditos.

 

Escala de puntuaciones:

1	Para largarlo por el desagüe del fregadero
2	Mejor en el guiso.
3	Se bebe, pero no vale lo que cuesta.
4	Un vino agradable y correcto.
5	Me gusta, me gusta, me gusta.
6	Orgásmico.

Acerca de Baco & Dionisos

•Aunque en el ámbito mitológico, Baco y Dionisos son dos retratos de una misma realidad (ambos representan en esencia a la misma divinidad clásica, perteneciendo Baco al panteón romano y Dionisos al griego), este blog se articula en torno a la opinión de dos realidades diferenciadas; la de un asimilado Baco, que suscribe la presente y encarnado en la figura de Rubén Parcero, y la de un audaz Dionisos que, aunque todavía sigue algo bebido allá por el monte Olimpo, se incardina en la persona de Puli Cores, resultando éste toda una autoridad práctica en la degustación de incontables caldos de diversos orígenes y denominaciones.
•Nuestro blog nace como una necesidad comunicativa necesaria, directa y popular, de la realidad cotidiana del vino. Desmitificándola. Desnudándola de toda impregnación elitista e irreal. Desvinculada de un establishment, en nuestra opinión, trasnochado y soberbio; compuesto de legiones de "expertos" sumilleres, catadores y demás supuestos especialistas fetichistas de terminologías apabullantes e ininteligibles que usan sin escrúpulo alguno (con entendimiento o no, eso es lo de menos) para amparar su supuesta profesionalidad y que, al final, en nada ayudan al consumidor último a forjarse una realidad más o menos verídica de las sensaciones y sabores que les va a transmitir la copa de vino que tienen delante de sus narices, y que contribuyan a resolver una cuestión fundamental, que no es  en absoluto baladí, y que constituye la madre de todas las preguntas; ¿me gustará o no me gustará este vino?. Casi nada.
•Es por ello que vamos a prescindir, en la medida de lo posible, de adjetivos grandilocuentes y de tecnicismos innecesarios en nuestras valoraciones personales. No somos tan insolentes como para pretender hacer de nuestra opinión un dogma de fe, pero en la medida en que nuestra opinión ayude a cualquier persona, amante, interesado o primer bebedor, a elegir para su satisfacción un vino adecuado y gustoso... habremos obtenido para nuestro amado vino una gran victoria.